En el camping "Entrerrobles" de Valdeavellano de Tera.
Bueno, aquí va el teletipo del fin de semana en Valdeavellano de Tera nuevamente relatado por el capitán Vidal, una historia que incluye setas, una mariscada, camionetas de transporte de ganado y mucha agua:
Cuatro palabras para resumir otra experiencia cojonuda y que nos ha vuelto a salir bordada...
22 sambureños han disfrutado de esta actividad.
Lo primero de todo agradecer a Ricardo Sánchez, anfitrión y responsable del camping Entrerrobles de Valdeavellano de Tera, en todo lo que se compromete con nuestro grupo siempre que programamos una actividad por "el valle" (ya me decía Sandra -en la Cope- que "con esos precios y en tiempos de crisis es dificil resistirse..."). La verdad es que ha estado genial... hemos disfrutado de las "jornadas de las gambas y el percebe" y de una actividad micológica única. La cena especial fue el viernes... a todas nos chocaba la situación, puesto que era la primera vez que iniciabamos una actividad y lo primero que haciamos era ponernos tibios de gambas, percebes y otros productos del mar, regados con buen vino blanco... sin ninguna paliza previa pateando montes o destripando terrones, "el capitán está enfermo y chochea, esto no es lógico" -se oían comentarios.
El sábado, después de un buen desayuno... y lo más raro en nuestro grupo...¡¡¡sin madrugar!!!, nos pusimos en manos de nuestro anfitrión para después de unas pertinentes explicaciones del mundo de los hongos, echarnos, ahora sí, al monte. La actividad estaba marcada con dificultad nula, pero no fue tal... puesto que había que echarle ganas para salir de las instalaciones del camping con la que estaba cayendo -no dejó de llover en todo el día-, pero bueno... hicimos nuestro el dicho vasco de "al monte hasta con buen tiempo" y nos adentramos en él. ¡Adentrar, nos adentramos y de que manera!!! Aquí la actividad pasó a ser de dificultad alta puesto que Ricardo quiso que buscasemos setas en una recóndita parte del bosque de muy dificil acceso y nos desplazó a todos hasta ese lugar montados en un vehículo especial, ¡pero que muy especial! -un camioncillo de transporte de ganado... eso sí con lona (como si fueramos "espaldasmojadas" -u otra cosa peor- en busca de un norte). Las fotos no tienen desperdicio y nuestras espaldas no se mojaron por la lona y los chubasqueros. Disfrutando con la recolección -sobre todo níscalos y "migueles"- y llegada ya la hora de comer... algunos decidimos no repetir la experiencia del camioncillo y bajamos al camping andando... que es lo nuestro. Por cierto, seguía jarreando...
Ducha calentita y comida de despedida con setas de nuestra propia recolección: unos entrantes con migueles laminados macerados en vinagre de módena y de primero patátas con níscalos; de segundo albóndigas... que no tienen nada que ver con los hongos pero para que lo sepáis.
Después de comer nos despedirmos de nuestros anfitriones -la familia Sánchez- agradeciendo todo su buen hacer y se nos vuelve a calentar la boca emplazando una futura visita del grupo, bien micológica ¡como la que hemos vivido! o bien para presenciar la berreas... ¡Todo se andará!.
Y pasado mañana de nuevo en la carretera.....aprovechando el puente de Todos los Santos, hacemos un tramo del camino de Santiago, desde Vilanúa hasta Sangüesa pasando por Jaca, Berdún y el monasterio de Leyre (camino Jacetano).
¡Cundimos más que los Rolling Stones!
Camino Jacetano, ruta de Arlés. Del 1 al 4 de Noviembre"
¿Nos dará una tregua el tiempo?