sábado, 29 de septiembre de 2012

VI Ovochorizada. Morcuera 2012.

De San Esteban a Morcuera pasando por Atauta.

Domingo 23 de Septiembre de 2012.

Algo que empezó siendo una pequeña idea, se ha convertido en una de las actividades fijas año tras año. Me refiero claro está a las ovochorizadas Sanbur©, que con esta ya van por su sexta edición.

No está de más recordar de nuevo el concepto. Así define el diccionario Sanbur la ovochorizada:

Dícese de la degustación gastronómica de huevos y chorizo restaurados en alegre fritanga.

Previo a la comida realizamos una ruta mañanero-dominguera caminando siempre desde San Esteban hasta una de sus localidades pedáneas. Este año el destino ha sido Morcuera.

Comenzamos a las 8 y 35 minutos de la mañana del Domingo desde el frontón de San Esteban. Eramos nada menos que 64 personas, todo un éxito de participación. El día además acompañaba: una temperatura muy agradable, el cielo parcialmente nublado pero sin amenaza de lluvia. Perfecto para la práctica del senderismo.

Nuestro prestigioso socio morcuerés / morcuereño (¿cómo se dice?) Jesús nos preparó una ruta de 16,5km y ejerció de guia para la ocasión.

Atravesamos el puente sobre el Duero y salimos de San Esteban por la ancha pista que lleva hasta Atauta. A las 9:45h ya habíamos llegado al pueblo y tras un pequeño descanso en la zona de las peñas, bajamos al paraje del 'Hondo' también llamado Ciudad de la Alegría donde se encuentran bodegas, lagares y palomares y que está declarado como zona de interés comunitario.

En las peñas de Atauta con la Ciudad de la Alegría al fondo.

Parada obligatoria para el almuerzo, que acompañamos con un buen vino de la zona que nos ofreció uno de los lugareños. La cosa no acabó ahí, pues nos enseñó un lagar donde destacaba la enorme viga para la prensa de la uva, de un grosor y longitud notorios.

Continuamos en dirección sur dejando atrás grandes extensiones de viñedos hasta la fuente de San Juan, en lo que es parte del recorrido de la ruta del Cerco al Alfoz. Alli nos desviamos al Este adentrándonos en el monte de encinas.

Más tarde de nuevo hacia el Sur, el camino nos sacó del monte al páramo de Morcuera por donde caminamos durante 1 hora más hasta llegar a nuestro destino.

Y a la 1 de la tarde estábamos en Morcuera dando por finalizada nuestra caminata, que no nuestra aventura.

Morcuera con la iglesia al fondo.

Antes de preparar la pitanza, y para hacer un poco de hambre visitamos los museos etnológicos particulares primero de Jesús y luego de Pascuala. En ellos han ido almacenando pacientemente todo tipo de utensilios y aperos de los que antaño se usaban en los pueblos y en el campo y que ya están practicamente en desuso. Especialmente grande y bien surtido es el de Pascuala, que nos dio toda una lección sobre la vida tradicional en los pueblos. Afortunadamente no nos puso un examen después. Acabados los museos bajamos a ver una bodega.

Viendo el museo de Pascuala.

Y tras deporte y cultura viene el llantar, que también es cultura claro está. Como todos los años Chus, Elvira y Jarri (con la ayuda esta vez de Germán) nos prepararon unos apetitosos huevos con chorizo. Luego vino la alegre comida en el salón municipal (otrora escuela en la clase de los chicos, el bar está en la clase de las chicas). Aquello parecía una boda. Y hablando de bodas, nuestra compañera Mª Angeles de la zona Bur anunció allí mismo su próximo casamiento, con presentación de novio incluída.

Germán, Elvira, Jarri y Chus. Cocineros.
Menú único: huevos con chorizo.
El buen ambiente durante la comida.

Y como estupendo epílogo tras la celebración la lluvia hizo acto de presencia, un buen chaparrón nos alegró los corazones tras estos meses especialmente secos que venimos sufriendo.

Interior de la iglesia de Morcuera.

Finalmente agradecer a toda la gente de Morcuera su compañía y ayuda desinteresada, en especial a Jesús y Pascuala que ejercieron -y rivalizaron- como perfectos anfitriones: Jesús hizo de guia durante la caminata; ambos nos mostraron sus museos particulares aunque el de Pascuala es más espectacular; durante la comida Jesús nos ofreció su mejor vino pero Pascuala nos sacó unos postres más tarde; al finalizar esta los dos dieron un pequeño discurso y aquí el de Pascuala fue mejor por lo cual la nombramos anfritiona oficial de la IV Ovochorizada.

En resumen, el ambiente fue inmejorable y los morcuereños/morcuereses nos hicieron sentir como en casa.

El grupo al completo.

1 comentario :

  1. Con que la Pascuala fue mejor, jaja...potenciando la rivalidad,eh?

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